Cepillos de dientes, redes, boyas, cascos, envases de plástico... Eso y más forman parte del cúmulo de desperdicios en la deshabitada isla de Henderson, lo que la convierte en el territorio británico en el Pacífico sur con la mayor densidad de desperdicios producidos por el ser humano.

La mayoría son “objetos sin identificar de los que algunos solo miden un milímetro”, explicó a EFE Jennifer Lavers, del Instituto de Estudios Marinos y Antárticos de la Universidad de Tasmania.

Lavers participó en el estudio que la ONG ecologista británica RSPB llevó a cabo en Henderson y que constató la presencia de 671 restos de basura por metro cuadrado en la isla, el más alto índice del globo, según la revista científica Proceedings de la National Academy of Science.

Publicidad

Una foto aérea tomada con un dron muestra la capa de moco marino en las costas de Estambul, Turquía. Foto: -- ERDEM SAHIN

En la investigación se calcularon 3.570 desechos que llegan a sus costas día a día, a pesar de que sus playas forman parte de la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.

Basura desde Ecuador

Ecuador, al igual que Japón, China, Estados Unidos, Chile y Perú, o países más alejados como Alemania, Francia, España y Reino Unido: todas estas naciones marcan a la isla que forma parte del archipiélago británico con sus desperdicios.

(Tomado de www.theoceancleanup.com) Playas como esta en Marruecos reflejan la problemática de la contaminación marina. De los 8,4 millones de toneladas de residuos que entran en los océanos cada año, hasta el 80 % son plásticos.

Queda más que comprobado que la distancia no es impedimento para su llegada: el territorio de 37 kilómetros cuadrados se encuentra a más de 5.000 kilómetros de distancia de la masa continental más cercana y solo recibe visitas con fines educativos y científicos cada cinco o diez años.

Publicidad

Según Lavers, una posible causa de la contaminación podría ser su proximidad al giro oceánico del Pacífico sur, un sistema de corriente latina rotativa que transportaría los desechos de tantos países hasta el recóndito lugar. (I)